GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS…
GRACIAS POR TU BRÚJULA, POR
ORIENTAR Y GUIAR NUESTRO CURSO ESCOLAR
CELEBRACIÓN FIN DE CURSO – EDUCADORES-
GRATITUD -2018- ¡SIEMPRE ACOMPAÑADOS!
Después de un largo curso, llegamos al final del mismo.
El Señor nos ha ido acompañando
en él, ha ido alentando nuestro corazón,
nos ha ido llamando para
caminar por sus senderos,
nos ha enviado su Espíritu para que nos
convirtamos
en sus testigos en nuestros
propios ambientes.
Ha caminado junto a nosotros, escribiendo con nuestro LÁPIZ, una bella historia de amor y cariño.
Ha caminado junto a nosotros, escribiendo con nuestro LÁPIZ, una bella historia de amor y cariño.
Pero siempre, aunque haya
tardado, ha surgido una pequeña luz, una palabra viva que nos alentaba y nos
hacía mirar hacia delante.
GRACIAS porque tu brújula nos ha orientado.
Con música
de fondo se va leyendo pausadamente.
REFLEXIÓN
¿Qué hacer entonces al
finalizar un curso? Da gracias…
Da gracias, por la vida misma,
aunque la tuya no sea la más perfecta, Dios te la dio y el tenerla es un
milagro. Aprende a valorarla para hacerla llevadera.
Valora ahora todo lo que el
Señor te ha ido dando en este curso. Seguro que Dios ha sabido darte muchos
regalos. ¿Por qué no haces un recuento de todos esos regalos? Y si la vida ha sido el mejor
regalo, da ahora gracias por el aire que respiras, da gracias por cada respiro
que des y recuerda y ten presente que Dios lo creó pensando en ti.
Da gracias por la luz del sol:
es la que te permite que veamos el día en esplendor, la que da vida a la
hermosura de la creación, y da calor a los seres vivos de la tierra.
Da gracias por la noche, Dios la hizo para
darnos descanso, para que la tierra repose del afán del día, y es cuando
realmente puedes relajarte y meditar, para poder reponer fuerzas para seguir
adelante.
Da gracias por el agua que cae
del cielo, Dios la envía para hacer de nuestro suelo uno fértil y productivo y
es la misma agua que al estar sedientos, calma nuestra sed.
Da gracias por los lápices con que hemos escrito este curso, los lápices pequeños de los niños, y el lápiz más grande de padres y educadores.
Da gracias por las dificultades que han llegado a tu vida. No te lamentes cuando estas llegan, más bien tómalas de un modo positivo. Las pruebas te hacen más fuerte para enfrentarte a la vida. Recuerda en qué te han ayudado, qué purificaron en tu vida, qué debilidad has tenido que palpar y tocar.
Da gracias por los lápices con que hemos escrito este curso, los lápices pequeños de los niños, y el lápiz más grande de padres y educadores.
Da gracias por las dificultades que han llegado a tu vida. No te lamentes cuando estas llegan, más bien tómalas de un modo positivo. Las pruebas te hacen más fuerte para enfrentarte a la vida. Recuerda en qué te han ayudado, qué purificaron en tu vida, qué debilidad has tenido que palpar y tocar.
Da gracias por los besos y los
abrazos que has recibido. Un ABRAZO es el festejo del encuentro, el
consuelo del dolor, la alegría de tener a la persona que aprecias... Un
ABRAZO pone al descubierto nuestros sentimientos, nuestros miedos... Un ABRAZO
nos acerca corazón con corazón, nos deja sentir la intensidad de nuestros
latidos, el calor de nuestra ilusión...
GRATITUD. porque un ABRAZO es entregarse al otro, y es resguardo y protección...GRACIAS por cada instante.
GRATITUD. porque un ABRAZO es entregarse al otro, y es resguardo y protección...GRACIAS por cada instante.
Da gracias por todo lo que
eres, no te quejes de que no siempre eres como quieres, Dios permite todo lo
que llega a tu vida, pero lo permite porque tiene su razón de ser. Nada pasa
solo porque sí, al final verás y entenderás la razón. Da gracias a Dios por todo,
por las cosas grandes y aún por pequeñeces… Él, muy agradecido,nos recompensará.
Da siempre gracias... Sentirás
alivio y paz, si las das de corazón.
Dejamos un tiempo de silencio
También
Jesús da gracias
Lectura del Evangelio según S. Mateo
(11, 25-27)
En aquella ocasión Jesús tomó la palabra y
dijo:
¡Te doy gracias Padre, Señor de cielo y tierra,
porque, ocultando estas cosas a los sabios
y entendidos, se las diste a conocer
a la gente sencilla!
Sí, Padre, ésa ha sido tu elección. Todo me lo ha encomendado mi Padre: nadie conoce al Hijo sino el Padre; nadie conoce al Padre sino el Hijo
y aquél a quien el Hijo decida revelárselo. Palabra de Dios.
¡Te doy gracias Padre, Señor de cielo y tierra,
porque, ocultando estas cosas a los sabios
y entendidos, se las diste a conocer
a la gente sencilla!
Sí, Padre, ésa ha sido tu elección. Todo me lo ha encomendado mi Padre: nadie conoce al Hijo sino el Padre; nadie conoce al Padre sino el Hijo
y aquél a quien el Hijo decida revelárselo. Palabra de Dios.
Oración de tod@s junt@s
Señor, Tú nos dijiste: “Yo os elegí para que deis fruto y vuestro
fruto permanezca”.
Nos invitaste a trabajar en tu campo
por la VIDA.
A principio de curso aceptamos esta
invitación
y ahora te presentamos la cosecha.
Nos recordaste: “La mies es mucha y los obreros pocos”.
Y nos pediste “Sed luz en la tierra”. Hemos intentado alumbrar,
para que la oscuridad no bloqueara
nuestro camino.
A veces, aún sin brújula, es necesario
avanzar,
incluso sin conocer el camino.
La oración de cada mañana,
y todas nuestras celebraciones, han
sido la herramienta.
Nos dijiste: “Dejad que los niños vengan a Mi”.
Nos enseñaste que tu preferencia eran los más débiles, los más
indefensos:
los niños, los que sufren a causa de
la falta de oportunidades de estudio,
la dejadez de sus familias o la falta
diaria de alimento.
Para ellos hemos trabajado en nuestras
aulas,
en nuestras campañas, en nuestra
sensibilización.
Hemos trabajado para que tu enseñanza
no quedara estéril.
Nos prometiste: “Yo estaré con vosotros hasta el fin de los tiempos”.
Confiamos en tu Palabra y vamos viendo
como cada día se hace realidad.
En tantos gestos, miradas, silencios,
denuncia de injusticias,
palabras de ánimo, acompañamientos,
risas…
has estado con nosotros, aunque a
veces no te reconozcamos.
Nos legaste un mandamiento: “Amaos, no de cualquier manera,
sino como Yo os he amado”.
Intentarlo, lo hemos intentado.
Aunque a veces el trabajo nos
desborde,
los alumnos nos agoten o nos echen
pulsos.
Tú Señor, sabes que aún así los hemos
amado.
Nos enseñaste con tu propia vida que eres PAN Y VINO, Alimento en nuestro camino, Eucaristía y Palabra que fortalece.
Nuestro deseo, nuestra inquietud, nuestro anhelo es: alumbrar,trabajar, guiar, servir, amar.
Y en todo ello no tomarnos vacaciones.
Gracias, Señor, porque Tú, como Maestro por excelencia,
nos enseñaste la práctica.
Nos acompañaste y ayudaste a lo largo
del curso que ahora termina.
Gracias, porque a pesar de nuestras
debilidades, comodidades, miedos e ingratitudes,
Tú, Dios de La VIDA, seguirás siempre
a nuestro lado,
acompañando nuestra historia.
Contamos contigo y sabemos que Tú
también cuentas con nosotros
para ir construyendo el Reino que tu quieres.
Gracias por el descanso que ahora vamos a disfrutar.
Gracias por el descanso que ahora vamos a disfrutar.
GRACIAS BUEN MAESTRO.Amén